MOSCÚ.- El ejército ruso afirmó que Ucrania lanzó seis misiles de largo alcance de fabricación estadounidense contra la región rusa de Bryansk, en una grave escalada en medio de la creciente tensión entre Moscú y Washington cuando se cumplen mil días de guerra. Kiev desmintió oficialmente esa información, aunque un oficial lo confirmó off the record al diario The Washington Post.
Rusia dijo que sus fuerzas derribaron cinco de los seis misiles disparados contra una instalación militar en la región de Bryansk, mientras que los restos de uno de ellos impactaron en la instalación, sin causar víctimas ni daños.
En un comunicado publicado por agencias de noticias rusas, el ministerio de Defensa ruso dijo que el ejército derribó cinco de los misiles de largo alcance y dañó uno más.
“A las 3.25, el enemigo atacó con seis misiles balísticos un emplazamiento en la región de Briansk. Según datos confirmados, se utilizaron misiles tácticos ATACMS de fabricación estadounidense”, informaron las agencias de noticias estatales rusas citando un comunicado del ejército.
Los fragmentos cayeron en el territorio de una instalación militar no especificada, según el ministerio. Los escombros que cayeron provocaron un incendio, pero no causaron daños ni víctimas, dijo.
El anuncio se produce poco después de que Washington levantara las restricciones a Ucrania para utilizar misiles de largo alcance de fabricación estadounidense para atacar a Rusia, lo cual provocó una fuerte amenaza por parte de Rusia.
Las fuerzas armadas ucranianas habían informado sobre un bombardeo perpetrado el lunes por la noche contra un depósito de armas en la región rusa de Bryansk, a unos 110 kilómetros dentro de Rusia, pero no confirmaron el uso por primera vez de los misiles balísticos Atacms suministrados por los Estados Unidos.
En su página de Facebook, el comando dijo que en el ataque fue alcanzado un arsenal del 1046 Centro Logístico Ruso cerca de la ciudad de Karachev, a 130 kilómetros de la frontera con Ucrania. Según las fuerzas, citadas por la agencia Ukrinform, tras el bombardeo se produjeron 12 explosiones secundarias.
“Continuará la destrucción de los depósitos de municiones de los ocupantes rusos para detener la agresión armada contra Ucrania”, concluye el comunicado.
Poco antes el medio RBC había afirmado que en el ataque se habían utilizado por primera vez los misiles de largo alcance Atacms. “El objetivo fue alcanzado con éxito”, dijo una fuente de las fuerzas armadas al medio.
En los últimos meses, las fuerzas ucranianas han bombardeado repetidamente depósitos de municiones utilizando drones en varias regiones de Rusia, incluida Bryansk.
El presidente Joe Biden dio su aprobación esta semana para que Ucrania utilice los misiles estadounidenses para ataques de largo alcance, que Moscú ha descrito como una escalada que convertiría a Washington en un combatiente directo en la guerra y provocaría represalias. El anuncio se produjo justo antes de que este martes se cumplieran mil días desde la invasión rusa, con tropas cansadas en el frente, Kiev asediada por ataques aéreos y dudas sobre el futuro del apoyo occidental mientras Donald Trump regresa a la Casa Blanca.
Los expertos militares dicen que los misiles estadounidenses pueden ayudar a Ucrania a defender un reducto que ha capturado como moneda de cambio dentro de Rusia, pero no es probable que cambien el curso de la guerra que dura 33 meses.
Se esperan cambios potencialmente más importantes en la postura estadounidense cuando Trump regrese al poder en dos meses, tras haber prometido poner fin a la guerra rápidamente sin decir cómo.
En un discurso ante el parlamento, el presidente Volodimir Zelensky dijo que los “momentos decisivos” de la guerra llegarían el año próximo.
Doctrina nuclear
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó el martes una doctrina nuclear revisada que declara que un ataque convencional contra Rusia por parte de cualquier nación que esté apoyada por una potencia nuclear será considerado un ataque conjunto contra su país.
La firma de la doctrina, que indica que cualquier ataque aéreo masivo contra Rusia podría desencadenar una respuesta nuclear, refleja la disposición de Putin de amenazar con emplear el arsenal nuclear de su país para forzar a Occidente a retroceder, mientras Moscú presiona con una ofensiva lenta en Ucrania.
Ante una pregunta sobre si la doctrina actualizada se había emitido de forma deliberada tras la decisión de Estados Unidos de retirar restricciones para que Ucrania utilice sus misiles de largo alcance contra Rusia, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el documento se publicó “de manera oportuna” y que Putin dio instrucciones al gobierno para actualizarlo a principios de este año para que esté “en línea con la situación actual”.
El presidente de Rusia advirtió en el pasado a Estados Unidos y otros aliados de la OTAN que permitir que Ucrania use armas de largo alcance suministradas por Occidente para atacar territorio ruso supondría que Rusia y la OTAN están en guerra.
La nueva versión del documento establece que un ataque contra su país por una potencia no nuclear con la “participación o apoyo de una potencia nuclear” se interpretará como un “ataque conjunto a la Federación Rusa”. Añade que Rusia podría utilizar armas nucleares en respuesta a un ataque nuclear o un ataque convencional que represente una “amenaza crítica para la soberanía y la integridad territorial” de Rusia y su aliada Bielorrusia, una formulación vaga que deja un amplio margen para la interpretación.
El texto no especifica si tal ataque desencadenaría necesariamente una respuesta nuclear. Menciona la “incertidumbre de escala, tiempo y lugar de posible uso del disuasivo nuclear” entre los principios clave de la disuasión nuclear.
El documento también señala que una agresión contra Rusia por parte de un miembro de un bloque militar o coalición se considera “una agresión por todo el bloque”, una clara referencia a la OTAN. Al mismo tiempo, detalla las condiciones para el empleo de armas nucleares con más detalle que la versión anterior de la doctrina, y señala que podrían utilizarse en caso de un ataque aéreo masivo que implique misiles balísticos y de crucero, aviones, drones y otras aeronaves.
Los vagos términos parecen ampliar de forma significativa los desencadenantes para el posible uso de armas nucleares en comparación con la versión anterior del documento, que establecía que Rusia podría recurrir a su arsenal atómico si se recibía “información confiable sobre el lanzamiento de misiles balísticos dirigidos al territorio de Rusia o sus aliados”.
Agencias AP, Reuters y ANSA