ÁMSTERDAM.- Los episodios de violencia en Ámsterdam dejaron a la ciudad conmocionada tras una serie de ataques dirigidos contra hinchas israelíes que visitaban la capital holandesa para asistir a un partido de la Europa League entre el Maccabi Tel Aviv y el Ajax.
Según dijo a la BBC Adi Reuben, un hincha del Maccabi Tel Aviv, él fue atacado por un grupo de hombres que lo tiraron al piso y lo golpearon mientras gritaban “Judío, FDI” (por las Fuerzas de Defensa de Israel) y “Palestina”. Reuben describió la agresión como una emboscada que lo dejó con la nariz rota y otros traumatismos.
“Empezaron a meterse conmigo y me di cuenta de que tenía que correr, pero estaba oscuro y no sabía adónde ir. Caí al suelo y 10 personas me estaban dando patadas. Gritaban ‘Palestina’. Estuvieron dándome patadas en el piso durante un minuto, luego se fueron, no tenían miedo de nada”, describió Reuben a la cadena británica.
“Me di cuenta de que tenía la nariz llena de sangre y me la habían roto, es muy doloroso”, agregó.
Después del ataque, quedó con la vista borrosa durante unos 30 minutos, contó. Sin embargo, decidió no acudir al hospital porque, según había escuchado, algunos taxistas podrían estar implicados en la violencia.
Reuben decidió regresar a Israel el viernes en un vuelo organizado por el gobierno israelí, donde recibirá tratamiento médico. Reuben describió el ataque como algo “específico y organizado de antemano”, una opinión compartida por otros hinchas del Maccabi.
El gobierno israelí envió dos aviones a Holanda para repatriar a los ciudadanos israelíes afectados por el ataque.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, solicitó a su homólogo holandés, Dick Schoof, que garantizara la seguridad de los ciudadanos israelíes y enfatizó la importancia de proteger a la comunidad judía en el país europeo.
Gal Binyanmin Tshuva, de 29 años, dijo a la BBC que fue atacado fuera de un casino en la ciudad después de ver el partido. “Nos enfrentamos a unas 20 personas que corrieron hacia nosotros. Me preguntaron de dónde era y les dije que era de Grecia. Dijeron que no me creían y me pidieron que les mostrara mi pasaporte”, relató.
“Dije que no tenía mi pasaporte y luego me golpearon y me empujaron al suelo y comenzaron a patearme la cara. No recuerdo nada después de eso, y me desperté en una ambulancia con sangre por toda la cara, y me di cuenta de que me habían roto dos dientes”, agregó.
Pnina, otra hincha del equipo israelí, declaró al medio holandés NOS que los ataques parecían premeditados. “Había mucha gente. Nos saltaron encima… Nos escondimos en los hoteles hasta que fue seguro salir”, explicó.
La situación generó tal nivel de temor que la editora Esther Voet, de un semanario judío en Ámsterdam, ofreció refugio en su casa a varios hinchas israelíes. “Les dije que esta es una casa judía y que aquí están seguros”, contó Voet a la cadena israelí Kann. “La gente estaba realmente asustada. Nunca pensé que viviría algo así en Ámsterdam”.
Las autoridades de Ámsterdam, incluyendo al jefe de policía Peter Holla, reconocieron la gravedad de la situación. “Hemos vivido unas 36 horas que realmente me han impactado. No pudimos prevenir este tipo de violencia”, señaló Holla.
Los ataques se realizaron en forma de “hit-and-run”, en los que jóvenes en scooters se acercaban y atacaban para luego escapar rápidamente. Aunque la policía desplegó un importante número de efectivos, resultó difícil contener la violencia, lo que llevó a que las fuerzas de seguridad escoltaran a los hinchas israelíes y los trasladaran en colectivos a un lugar seguro.
Según la alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, los ataques representan “una terrible muestra de antisemitismo” y dijo que la guerra en el Medio Oriente “ha amenazado la paz en nuestra ciudad”. La alcaldesa expresó su preocupación por cómo estos incidentes evocan recuerdos históricos de persecución en Europa, y añadió: “Que esto ocurra en Ámsterdam es inadmisible”.
Por su parte, el rey Guillermo Alejandro expresó su consternación y la de su mujer, la reina Máxima, ante los actos de violencia antisemita en su país después de hablar con el presidente israelí, Isaac Herzog.
Reactie van Koning Willem-Alexander op het geweld tegen Israëlische supporters in Amsterdam: https://t.co/dlUspnZ11m pic.twitter.com/SfHIIA2GgV
— Koninklijk Huis (@koninklijkhuis) November 8, 2024
Tensiones en aumento
Según pudo reconstruir la BBC, los ataques que se extendieron durante la noche hasta el viernes surgieron tras un aumento de tensiones entre los seguidores del Maccabi y algunos habitantes de Ámsterdam en días anteriores.
El miércoles, se informó que algunos aficionados del Maccabi habrían agredido un taxi y quemado una bandera palestina, según dijo Holla. En respuesta, un grupo de taxistas se dirigió hacia el lugar donde se reunían unos 400 seguidores del Maccabi, aunque la policía logró dispersarlos de la zona. Más enfrentamientos tuvieron lugar en la plaza Dam durante la noche del jueves, si bien los agentes lograron mantener a los grupos separados en gran medida.
El jueves por la tarde, las fuerzas de seguridad escoltaron a manifestantes pro-palestinos y lograron, en su mayoría, mantenerlos separados de los aficionados al fútbol. Sin embargo, no lograron impedir que se produjeran nuevos actos de violencia más tarde esa noche. Cinco personas resultaron heridas pero fueron dadas de alta del hospital y entre 20 y 30 más resultaron levemente heridas.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, viajará en las próximas horas a Holanda para reunirse con las autoridades holandesas para abordar la situación de los disturbios que se produjeron durante la noche.
”Voy a Holanda en mi primera e imprevista misión como ministro de Asuntos Exteriores de Israel para presentar nuestra verdad”, anunció Saar, para quien lo ocurrido en Ámsterdam “es una clara llamada de alarma para Europa y el mundo”.
Agencias AFP y AP