Elsa y Elmar es una de las cantantes colombianas más queridas por las nuevas generaciones, pues muchos y muchas jóvenes suelen identificarse con las letras y ritmos de sus melodías.
Fue así que el pasado 06 de noviembre, pocos días antes de que la famosa de su concierto en el Palacio de los Deportes en la CDMX, sorprendió a oficinistas al darles un show privado.
¿Cómo fue el show privado de Elsa y El Mar?
Eran alrededor de las 06 de la tarde, cuando una larga fila de personas estaban a las afueras de un WeWork ubicado en Varsovia 36, es decir, un conglomerado de oficinas a unas calles del Ángel de la Independencia.
Tras obtener el acceso y como si fuera un día de oficina normal, ingresaron por la recepción y subieron por el elevador al onceavo piso. No obstante, en esta parte no había computadoras y escritorios como podría esperarse, sino que estaba todo ambientado y listo para la presentación.
Al ingresar a esta parte del edificio, los letreros de Sol Clamato anunciaban el Modo Tranqui, que es la campaña bajo la cuál diversos artistas han ofrecido espacios de diversión y música a los ya tan conocidos godínes.
Es así que desde la entrada el personal recibía a los invitados con cervezas a las que no les faltaba su clásico escarchado y hasta con gomitas contaban. Como si esto no fuera suficiente, también había para los más antojadizos algunas botanas con esquites que causaron largas filas y furor entre los asistentes.
Alrededor de las ocho de la noche, Elsa y Elmar apareció en el escenario. Los gritos de sus fans no tardaron en aparecer y la colombiana se mostró muy contenta y sorprendida del público que la recibió, pues creyó que al ser un concierto en una oficina, pocos conocerían su música.
Contrario a esto, quienes asistieron a la presentación musical pudieron corear a muy pocos metros de su artista favorita algunos éxitos como Grecia, Ke mal, Palacio, Ojos noche y muchas otras más.
“No me pidan una más al final porque es incómodo”, bromeó Elsa casi al final de la presentación.
Pero, como algo inevitable, después de que terminó de corear su última melodía, el público le rogó por una canción adicional. La famosa sumamente apenada comentó que no podía y con su cálida forma de ser pidió que colocaran otra música y se retiró del escenario entre aplausos de su público.