Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) ha consolidado su presencia en el Valle de México, según un informe reciente dado a conocer por le periodista Antonio Nieto.
A pesar de los esfuerzos de las autoridades, el CJNG ha logrado establecer puntos de venta de droga en el sur y oriente de la región, incluyendo áreas como Nezahualcóyotl,. en el Estado de México y en la alcaldía Iztapalapa, al oriente de la Ciudad de México.
Este avance se ha dado a pesar de los intentos de las autoridades por contener su expansión, como el atentado en 2020 contra Omar García Harfuch, entonces secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México., quien fue atacado por una de estas células en Lomas de Chapultepec.
El periodista Antonio Nieto reveló que la Agencia de Investigación Criminal y la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada poseen un organigrama detallado de la estructura del CJNG.
Este cártel, que comenzó su incursión en la Ciudad de México hace siete años, ha utilizado diversas estrategias para afianzarse, incluyendo la colaboración con grupos delictivos locales y la ejecución de operaciones como “Humo”, que buscaba controlar el narcomenudeo en la capital.
En 2018, el entonces alcalde de Xochimilco, Juan Carlos Acosta, denunció amenazas del CJNG, aunque en ese momento las autoridades locales consideraron que se trataba de imitadores. Sin embargo, el tiempo demostró que el cártel efectivamente estaba detrás de estas acciones, reveló el reportero en un hilo de su cuenta X.
Señaló que el CJNG intentó alianzas con grupos como la Anti-Unión y el Cártel de Tláhuac, aunque estas no prosperaron. Sin embargo, sí lograron establecer vínculos con narcomenudistas en la alcaldía de Gustavo A. Madero.
El CJNG también ha sido responsable de actos violentos, como el asesinato de dos ciudadanos israelíes en Plaza Artz en 2019. Además, han llevado a cabo operaciones de reclutamiento, enviando a jóvenes de la Ciudad de México a Puerto Vallarta para entrenamiento y luego regresarlos para operar en el Estado de México. En esta región, el cártel ha ganado terreno en municipios como Cuautitlán Izcalli, Coacalco y Atizapán, y ha comenzado a expandirse hacia Ixtapaluca, Chalco y Valle de Chalco.
A pesar de las detenciones y decomisos realizados por las autoridades, el CJNG ha continuado su expansión mediante la creación de células operativas. Entre los líderes de estas células se encuentran individuos conocidos como el “Viejón”, el “Conta” y “Super Charger”, mientras que los comandantes incluyen al “Flaco”, el “Valle” (detenido), “Bravo” y “Pon”. El “Cupra” es el encargado de los puntos de venta desde Izcalli hasta Coyoacán, Iztapalapa y Xochimilco.
El CJNG ha diversificado sus operaciones mediante la creación de empresas legales en el Valle de México, abarcando desde farmacéuticas hasta agencias de representación artística. Recientemente, Jesús Pérez fue procesado por su relación con estas actividades. Además, varios artistas y raperos están bajo la lupa de la Unidad de Inteligencia Financiera y la FEMDO, reveló el también autor del Cártel Chilango.
El único obstáculo significativo para el CJNG en la Ciudad de México es la alcaldía Cuauhtémoc y el grupo La Unión. La persona identificada como El “Flaco” es el encargado de enfrentar a estos rivales.
La expansión del CJNG en la capital parece inevitable, y aunque han logrado pactos con grupos locales, su dominio total aún enfrenta resistencia, zanjó el coautor del libro Narco CDMX.