La industria de las criptomonedas gana atractivo en la Argentina. Según el reporte de diferentes plataformas, el país se ubica como uno de los de mayor adopción en términos de transacciones y valor transferido con activos digitales en Latinoamérica. Ante este escenario, y en el marco del Foro Argentino de Inversiones organizado por la Asociación Argentina de Capital Privado, Emprendedor y Semilla (Arcap), especialistas coincidieron en que hoy es un buen momento para invertir en el ecosistema cripto local.
Para Sebastián Serrano, fundador de Ripio, el atractivo no es solo de las empresas locales que ofrecen servicios a la Argentina y a la región, sino también de aquellas que ofrecen protocolos para todos los proyectos de criptomonedas del mundo. “Tenemos grandes ejemplos de piezas clave de la estructura de criptomonedas, en frameworks, en aplicaciones y en protocolos desarrollados por argentinos. La mayoría de los tokens son referentes en la tecnología de Ethereum y usan uno de los principales frameworks de seguridad. Nosotros lo utilizamos, por ejemplo, para la creación de Mercado Coin -lanzada en 2022 por Mercado Libre-”, consideró.
Asimismo, el ejecutivo remarcó: “Los dos principales proyectos de metaversos son argentinos. Y el mundo está lleno de ejemplos de argentinos en esos proyectos. Esto viene atado a mucho talento que surgió de ver las necesidades que existen en la Argentina y que esta tecnología puede ser parte de la solución. El universo cripto es realmente global”.
A la hora de analizar la explosión del ecosistema cripto en la Argentina, Borja Martel Seward, cofundador y CEO de Roxom, la primera bolsa de valores nativa para inversiones en bitcoin, se remontó a 2011. “Cuando el Gobierno estableció el cepo cambiario, muchas personas que trabajaban para el extranjero no podían cobrar y empezaron a hacerlo en bitcoin. El cepo hizo que, ya en ese entonces, el mundo adopte bitcoin. La historia data desde ahí y el mercado nunca paró de crecer. Todo el mundo cripto viene a la Argentina para ver qué pasa en la industria”.
Hacia un hub de la Web 3.0
En este contexto, para Martel Seward la Argentina tiene la oportunidad de convertirse en un hub de Web 3.0 –la tercera generación de la World Wide Web, que se caracteriza por ser una web descentralizada, abierta y centrada en el usuario, apoyada en la tecnología blockchain-.
No obstante, el CEO de Roxom también aclaró: “Inicialmente, en la década del 2000, la Argentina estuvo a la delantera en el ecosistema tecnológico de la región, con los Mercado Libre, Globant y Despegar, todos unicornios que lograron escala; mientras que para el 2008, por ejemplo, Brasil no tenía aún ni un unicornio. Hoy, por el contrario, hay más posibilidades de que surjan más empresas de tecnología fuertes en Brasil que en la Argentina. Y creo que el gran diferencial es que no tenemos un mercado de capitales fuerte: en Estados Unidos, para las compañías, el camino es muy claro: cuando llegan a un tamaño, se vuelven públicas y levantan muchísimo capital”.
“Creo que podemos dar un salto a futuro, pero es fundamental ordenar el marco político y regulatorio, para armar ese ciclo de innovación e invertir en startups tempranas que se desarrollen, y que se conviertan en empresas públicas. Podemos armar un mercado de capital que financie el desarrollo de emprendimientos, y que eso empiece a reestructurar y a potenciar valores”, amplió.
En esa línea, Gabriel Gruber, CEO de Exactly -un protocolo descentralizado y de código abierto- consideró dos de los desafíos que enfrenta el país. “Uno de los problemas en Argentina es que no somos ni muchos ni pocos. En Uruguay, por ejemplo, las empresas tienen claro que tienen que salir al extranjero, mientras que en Brasil, no. Asimismo, tenemos un problema regulatorio: hoy, los trámites son un dolor de cabeza”, precisó.