El presidente ruso Vladimir Putin declaró este martes que no desea una guerra con Europa, pero advirtió que si los europeos inician un conflicto, su país está preparado para responder, en comentarios realizados horas antes de una reunión crucial con emisarios estadounidenses en Moscú.
“No tenemos intención de ir a la guerra con Europa, pero si Europa quiere y empieza, estamos listos”, declaró Putin al margen de un foro económico, en una intervención ante la prensa cargada de retórica beligerante contra los líderes europeos.
El mandatario ruso acusó a los europeos de querer sabotear los esfuerzos de Estados Unidos para poner fin a la guerra en Ucrania. “Los europeos están molestos por haber sido excluidos de las negociaciones, pero ellos mismos se han apartado, ha sido una iniciativa suya”, afirmó Putin.
“No tienen un programa de paz, están del lado de la guerra”, añadió el presidente ruso, quien llamó a los dirigentes europeos a renunciar a la “ilusión” de que pueden infligir una “derrota estratégica a Rusia” y volver “a la realidad, basándose en la situación sobre el terreno”.
Las declaraciones se producen pocas horas antes de que Putin reciba en el Kremlin al enviado especial del presidente estadounidense Donald Trump, Steve Witkoff, y al yerno de Trump, Jared Kushner, después de las 1700 hora de Moscú (1400 GMT), según confirmó el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Se espera que los tres discutan el plan de Washington para poner fin al conflicto entre Rusia y Ucrania, el más mortífero en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Trump ha dicho que quiere terminar la guerra, pero sus esfuerzos hasta ahora, incluida una cumbre con Putin en Alaska en agosto y reuniones con el presidente ucraniano Volodimir Zelensky, aún no han traído la paz.
Un conjunto filtrado de 28 propuestas de paz del borrador estadounidense surgió la semana pasada, preocupando a funcionarios ucranianos y europeos que dijeron que cedía a las principales demandas de Moscú sobre la OTAN, el control de Moscú sobre una quinta parte de Ucrania y restricciones al ejército ucraniano.
El presidente Zelensky dijo el martes que los negociadores estadounidenses y ucranianos han refinado un marco de acuerdo de paz desarrollado en Ginebra durante sus recientes conversaciones en Florida. Zelensky agregó que Ucrania quiere que sus aliados europeos estén más involucrados en el proceso, y ordenó al equipo ucraniano “continuar con el trabajo más constructivo posible”.
La reunión en el Kremlin ocurre en un momento en que Rusia afirma haber logrado avances significativos en el terreno. La noche del lunes, Putin celebró lo que sus comandantes le informaron como la captura completa de la ciudad de Pokrovsk en el este de Ucrania, aunque el ejército ucraniano negó el martes que las fuerzas rusas hayan consumado la toma de la ciudad.
“Con el actual ritmo de nuestra ofensiva, el enemigo, obviamente, no está en disposición de reaccionar como es debido”, dijo Putin al reunirse con el Estado Mayor.
Analistas rusos han sugerido que la supuesta toma de Pokrovsk podría fortalecer la posición negociadora de Moscú al demostrar un avance significativo en la región de Donetsk, justo cuando Putin se prepara para recibir a los negociadores estadounidenses.
Rusia quiere hacerse con la totalidad de la región del Donbás, que comprende las provincias de Luhansk y Donetsk. Kiev y la mayoría de los países occidentales rechazan la toma del territorio por parte de Moscú por considerarla una apropiación ilegal de tierras.