
Entre los pasillos y camarines de MasterChef Celebrity (Telefe) no solo se cruzan participantes, conductores y jurados: también nacen amistades inesperadas entre los hijos de los famosos que acompañan a sus padres durante las largas jornadas de grabación. Tal es el caso de Eva y Shaina, las dos hijas de La Joaqui, quienes formaron un vínculo muy especial con Emma Demichelis, la hija menor de Evangelina Anderson y Martín Demichelis.
La amistad se fue forjando naturalmente mientras sus madres compartían horas detrás de cámaras en los estudios de Telefe, y los momentos de espera y juego se transformaron en una especie de “clan” infantil que también integran las hijas de Wanda Nara y Mauro Icardi.
Esta complicidad quedó documentada en las redes sociales, donde Evangelina y Joaqui compartieron una tierna postal: en la imagen se ve a Eva, Shaina y Emma sonrientes después de una noche de pijamada, con el cabello desordenado y sentadas en el sillón, reflejando la diversión y el espíritu genuino de una amistad nacida en el detrás de escena del reality. “Sabés que la pijamada estuvo buena cuando amanecen los pelos así”, escribió la cantante de RKT sobre la foto, reforzando el tono familiar y descontracturado del momento.

La imagen, rápidamente celebrada por las familias de los participantes, muestra que, más allá de la competencia en el set, existe un espacio de encuentro, juego y diversión para los más chicos, quienes también se llevan recuerdos y amistades imborrables de su paso por la televisión. Lo mismo sucede con los adultos, quienes aprovechan cada minuto libre entre grabaciones para disfrutar de cenas en conjunto y de salidas en la noche porteña.
La dinámica familiar detrás de escena en MasterChef Celebrity y en la vida cotidiana de las familias mediáticas se ha transformado en un espacio de encuentros y afectos inesperados. Además de la complicidad que forjaron las hijas de Anderson y la cantante en los pasillos del estudio de grabación, en los sectores comunes y jardines del Chateau Libertador —el edificio en Núñez donde residen ambas familias—, se consolidó otra relación entrañable con las hijas de Wanda.
La amistad entre los hijos de las participantes del reality trasciende la competencia televisiva. Por ejemplo, las hijas de la expareja de Demichelis con las pequeñas Icardi-Nara se tejió primero dentro del colegio al que asisten y en las áreas comunes del Chateau Libertador, mucho antes de las jornadas en televisión. Con el tiempo, los vínculos se consolidaron y las redes sociales de sus madres se llenaron de videos y fotos divertidas: desde bailes virales y challenges de TikTok grabados durante los recesos de las grabaciones del programa, hasta tardes de piscina, juegos y chapuzones.
Lo que años atrás era competencia y rivalidad mediática entre las madres de las pequeñas hoy se transformó en una relación de respeto y cercanía, impulsada por sus propios hijos y la amistad genuina que se gestó en la nueva generación. Ambas, ahora madres y colegas en el programa de cocina, comparten posteos y momentos de humor, mientras la complicidad familiar queda registrada en historias y reels. En una de esas publicaciones, Anderson mostró a Lola y a la hija mayor de Wanda bailando tentadas de risa al ritmo de “Can’t stop the feeling!” de Justin Timberlake, en pleno receso de grabación, y luego filmó otro video junto a Emma y a Isabella Icardi, con “Shiny” de Easykid.
Así, lo que antes era motivo de enfrentamiento mediático, hoy es símbolo de convivencia y nuevos vínculos, demostrando que los lazos más fuertes pueden construirse en los lugares más inesperados, desde un estudio de TV hasta los patios y ascensores de un edificio compartido.