El estudio realizado por científicos argentinos abre posibilidades para nuevos tratamientos contra la diabetes (Imagen ilustrativa infobae)

Un grupo de científicos argentinos identificó un mecanismo que fortalece la capacidad de las células pancreáticas productoras de insulina para resistir el daño, según publicó la revista científica Cell Death & Disease.

El estudio realizado por investigadores del Laboratorio de InmunoEndocrinología, Diabetes y Metabolismo del Instituto de Investigaciones en Medicina Traslacional (IIMT), perteneciente al CONICET y la Universidad Austral, reveló una estrategia potencial para mejorar el tratamiento de la diabetes, una enfermedad que afecta a más de 500 millones de personas en todo el mundo.

En el Día Mundial de la Diabetes, el avance fue presentado en una conferencia de prensa donde participó Infobae.

Qué descubrieron los investigadores argentinos

El estudio realizado por científicos argentinos abre posibilidades para nuevos tratamientos contra la diabetes (Imagen Ilustrativa Infobae)

El equipo encabezado por Marcelo Perone, al frente del Laboratorio de InmunoEndocrinología, Diabetes y Metabolismo del Instituto de Investigaciones en Medicina Traslacional (IIMT), demostró que las células beta del páncreas pueden adaptarse y adquirir mayor resistencia frente a situaciones de estrés si se exponen previamente a dosis muy bajas de una molécula inflamatoria, la interleucina-1 beta (IL-1β).

Este hallazgo modifica el enfoque clásico que siempre había señalado el rol perjudicial de IL-1β sobre estas células.

La bioquímica Carolina Sétula, primera autora del trabajo, detalló que la investigación se realizó en cultivos celulares y en islotes pancreáticos de ratón y rata. “El estímulo previo con bajas dosis de interleucina uno beta prepara a la célula para enfrentar un desafío inflamatorio posterior y la mantiene funcional”, explicó.

Por qué es relevante para la diabetes

El equipo proyecta que este hallazgo podría ser útil en diabetes tipo 1 y tipo 2 (Imagen Ilustrativa Infobae)

La diabetes genera un impacto sanitario y social considerable. Existen dos formas principales de la patología: la diabetes tipo 1, vinculada a una destrucción o disfunción de las células productoras de insulina, y la diabetes tipo 2, en la que estas células se deterioran progresivamente.

El funcionamiento correcto de las células beta resulta fundamental para controlar los niveles de glucosa sanguínea.

El nuevo mecanismo identificado, según explicó Perone, permite que estas células “aprendan a resistir el daño” y abre el debate sobre el papel ambivalente de la IL-1β. A diferencia de su efecto dañino en altas concentraciones, la exposición a cantidades muy bajas genera una respuesta adaptativa protectora, un proceso conocido como hormesis en biología. “Lo que antes considerábamos perjudicial podría, en ciertas condiciones, proteger a la célula”, sostuvo el investigador.

El proceso científico detrás del hallazgo

El proceso descubierto ayuda a entender cómo proteger a las células productoras de insulina (Imagen Ilustrativa Infobae)

Para alcanzar estos resultados, el equipo utilizó líneas celulares y aisló islotes pancreáticos de ratones. Los experimentos consistieron en una primera exposición de las células beta a dosis bajas de IL-1β, para luego someterlas a concentraciones elevadas de citoquinas proinflamatorias, como las que se encuentran en escenarios típicos de diabetes tipo 1 y tipo 2.

Sétula señaló que “el estímulo previo con dosis bajas de interleucina uno beta protege a la célula frente a ese estrés posterior”.

El fenómeno de hormesis descrito implica que pequeñas cantidades de una sustancia considerada tóxica pueden inducir una respuesta benéfica y fortalecer a la célula frente a futuros daños.

“Depende de la dosis y del tiempo de exposición”, indicó Sétula. Este concepto se observó también en contextos de ejercicio físico y de ciertas pautas alimenticias que inducen mecanismos similares de adaptación celular.

Diferencias y aplicaciones futuras en diabetes tipo 1 y tipo 2

La diabetes afecta actualmente a más de 500 millones de personas en todo el mundo

Durante el intercambio, Infobae consultó sobre la aplicabilidad del hallazgo a ambos tipos de diabetes. Frente a esta pregunta, Perone explicó que el hallazgo tiene proyección tanto en diabetes tipo 1 como tipo 2, ya que permite comprender mejor el proceso de deterioro de la célula beta y su posible recuperación.

“Conocer el funcionamiento de la célula beta ayuda a desarrollar herramientas para intervenir tanto cuando recién empieza el deterioro como en fases más avanzadas”, afirmó Perone.

Según el experto, en la actualidad se sabe que en personas con diabetes tipo 1, aún subsisten células beta latentes o que perdieron temporalmente su función insulínica, lo que abre una posible vía para recuperarlas. En la diabetes tipo 2, donde predomina la inflamación crónica, fortalecer la resistencia celular resulta un objetivo relevante.

El camino hacia nuevas terapias

Las células beta del páncreas pueden fortalecer su resistencia al daño al recibir dosis bajas de IL-1β (Imagen Ilustrativa Infobae)

Por otro lado, Infobae indagó sobre la proyección clínica y el uso en humanos de los hallazgos.

Es que si bien las pruebas realizadas hasta el momento se centraron en modelos animales, según detallaron Sétula y Perone, ya comenzaron experimentos con islotes pancreáticos humanos para verificar la aplicabilidad del mecanismo en humanos. “Hacen falta más estudios para conocer a fondo los procesos involucrados antes de trasladar estos conocimientos a la clínica”, explicó Sétula durante la rueda de prensa virtual.

El descubrimiento allana el camino para el diseño de estrategias terapéuticas que busquen activar la respuesta de la hormesis en las células beta. En este punto, Luz Andreone, otra de las autoras del trabajo, señaló que el foco no estará solamente en la IL-1β, sino en explorar diferentes mecanismos que permitan inducir esta adaptación, con el fin de preservar la función de las células que producen insulina.

Impacto y mensaje de los investigadores

Fortalecer la investigación básica resulta fundamental para avanzar en la lucha contra la diabetes (Freepik)

La colaboración con laboratorios internacionales como el de Raghavendra Mirmira en la Universidad de Chicago permitió replicar los resultados en otros contextos, lo que refuerza la solidez del hallazgo, según subrayó Perone.

Además del avance científico, el equipo puso de relieve la importancia del apoyo a la investigación en Argentina. “Demostramos que con recursos limitados es posible generar conocimiento que puede tener repercusión internacional. Con más apoyo a la ciencia, podemos llegar más lejos”, sostuvo Perone durante la conferencia.

Los investigadores destacaron que todavía no existen aplicaciones clínicas inmediatas para el hallazgo, pero subrayaron la importancia de seguir avanzando en el conocimiento básico. Andreone expresó que los pacientes y sus familias pueden confiar en que se están sentando las bases para tratamientos futuros orientados a mejorar la calidad de vida de quienes conviven con la diabetes.