Codillo de cerdo asado en cazuela (Adobe stock)

Queda menos de un mes para el inicio de la Navidad. Ante esto, ya son muchos los que han empezado con las compras y preparativos para las comidas de estas fechas. Las reuniones con familia y amigos se multiplican durante estas fiestas y las ganas por sorprender a los comensales siempre están presentes.

Por ello, te recomendamos esta receta de Codillo de cerdo asado en cazuela, un plato fácil de preparar que es ideal para compartir en la cena de Navidad.

Codillo asado en cazuela (Adobe Stock)

Receta de codillo de cerdo asado en cazuela

La receta de codillo de cerdo asado combina una cocción lenta que asegura una carne tierna y jugosa con un toque rústico gracias a las verduras y el caldo aromatizado. Así, este plato es el perfecto ejemplo de como con ingredientes sencillos se puede hacer una elaboración deliciosa.

Ingredientes:

  • 2 codillos de cerdo frescos (o salmuerados, previamente desalados en agua durante 12 horas).
  • 2 cebollas grandes.
  • 4 dientes de ajo.
  • 2 zanahorias.
  • 2 hojas de laurel.
  • 200 ml de vino blanco.
  • 500 ml de caldo de carne o agua.
  • 2 cucharadas de aceite de oliva.
  • Sal y pimienta al gusto.
  • 1 cucharadita de pimentón dulce

Tiempo de elaboración

El tiempo total necesario para la elaboración de esta receta es de 3 horas. De este tiempo, se necesitarán 15 minutos para la preparación inicial (limpieza, picado de ingredientes y sellado de los codillos). Después se necesitarán entre dos y dos horas y media para la cocción de la carne y entre 15 y 20 minutos para la reducción de la salsa y el acabado.

Cómo elaborar, paso a paso

  1. Para esta receta lo primero que hay que hacer es preparar los ingredientes. Si los codillos están en salmuera, desalarlos con antelación. Enjuágalos y déjalos en agua fría durante 12 horas, cambiando el agua al menos dos veces. Después, enjuágalos antes de cocinarlos.
  2. Más adelante, en una cazuela grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Sazona los codillos con sal y pimienta (con moderación si ya estaban en salmuera). Dóralos en la cazuela durante unos minutos por cada lado, hasta que estén bien sellados. Retíralos y resérvalos.
  3. Después prepara la base. Para ello, en la misma cazuela sofríe los ajos pelados y enteros junto con la cebolla cortada en juliana y las zanahorias en rodajas. Cocina a fuego medio hasta que las verduras estén tiernas y ligeramente doradas.
  4. En este momento, añade los líquidos y especias. Agrega el vino blanco y deja que se evapore el alcohol durante 2-3 minutos. Incorpora el caldo de carne (o agua), el laurel y, si lo deseas, el pimentón dulce.
  5. Tras ello, vuelve a colocar los codillos en la cazuela, asegurándote de que queden cubiertos al menos hasta la mitad con el líquido. De igual forma, tapa la cazuela y cocina a fuego lento durante dos horas o dos horas y media, girando los codillos cada 30 minutos para que se cocinen de manera uniforme.
  6. Finalmente, cuando la carne esté tierna y casi se desprenda del hueso, destapa la cazuela y sube ligeramente el fuego para reducir la salsa durante unos minutos.

¿Cuántas raciones se obtienen de esta receta?

Esta receta de codillo a la cazuela está pensada para 4 raciones. Sin embargo, las porciones pueden ajustarse dependiendo del tamaño de las raciones o si se sirve como plato único o como acompañamiento.

¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?

El valor nutricional de cada ración de esta receta puede variar ligeramente según los ingredientes exactos. Este es el valor nutricional aproximado de cada porción:

  • Calorías: 550-600 kcal.
  • Proteínas: 40-45 g.
  • Grasas: 35-40 g (principalmente grasas del cerdo).
  • Carbohidratos: 10-15 g (principalmente de las verduras).
  • Fibra: 2-3 g.
  • Sodio: 700-900 mg (si se usan codillos desalados).

¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?

La receta de codillo de cerdo asado en cazuela puede conservarse adecuadamente si se toman las precauciones necesarias. En el caso de querer guardarla en el frigorífico, es fundamental mantenerla en un recipiente hermético y asegurarse de que la preparación esté completamente fría antes de guardarla. Una vez en la nevera, el plato puede mantenerse en buen estado durante un período de tres días. Si se opta por el congelador, el tiempo máximo de conservación es de tres meses.