La subida del precio de la vivienda, a mayor velocidad de la calculada por los analistas, impulsada por la escasa oferta y la elevada demanda, no impedirá que las ventas continúen al alza en la recta final del año, marcando un nuevo boom en las transacciones. Una tendencia que quedó patente en septiembre, cuando las compraventas experimentaron un incremento mensual del 21,1% y un 41,5% interanual, hasta alcanzar las 61.887 operaciones, que no se lograban desde hace 14 años, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Otro de los catalizadores que impulsan la demanda de pisos es el cambio de ciclo hipotecario propiciado por el recorte de tipos de interés que inició en junio el Banco Central Europeo (BCE) hasta situarlos en el 3,25%. Esto ha llevado a los bancos a rebajar el interés que cobran por sus hipotecas y al euríbor a hundirse en noviembre hasta el 2,5%.
También puedes seguirnos en nuestro canal de WhatsApp y en Facebook
“Los compradores se lanzan al mercado, donde la oferta sigue siendo muy limitada. Son conscientes de que necesitan tomar decisiones rápidas en un contexto donde los bancos buscan los mejores perfiles”, indica Francesc Quintana, CEO de Vivendex y tesorero de la Asociació d’Agents immobiliaris de Catalunya.
467.865 compraventas en nueve meses
Esta tormenta perfecta es el preludio de un fuerte dinamismo en la adquisición de vivienda esperado para el último mes del año, apoyado también por la confianza del comprador en el mercado y el aumento de la tasa de ahorro de los españoles.
“Durante el ejercicio de 2024, la actividad de compraventas ha resistido muy bien a unos tipos de interés restrictivos y a un euríbor por encima del 3,7%, con una media de 50.000 operaciones mensuales. Sin embargo, sobrepasar la barrera de las 61.800 —como ha ocurrido en septiembre— significa marcar un nuevo récord, siendo el mejor septiembre de la historia de registros del INE”, reconoce María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.
En el cómputo global, hasta el mes de septiembre se firmaron 467.865 compraventas, lo que supone que en 2024 ya se haya mejorado el volumen del año 2023. Esta hambre de ladrillo de los españoles hará que en los próximos meses haya un 30% más de ciudadanos interesados en comprar, calculan los analistas de Fotocasa.
Financiación más barata
El factor que más incidirá en la sobredimensión de la compra de vivienda, en opinión de los expertos, será el inicio de un nuevo ciclo hipotecario de crédito fluido marcado por la rebaja de las hipotecas y la caída del euríbor. Los últimos datos de septiembre ofrecidos por el INE reflejan un incremento mensual de la firma de préstamos hipotecarios del 34,7% y una subida interanual del 33,9% hasta alcanzar las 41.306 hipotecas firmadas, una cifra que supera por primera vez las 40.000 mensuales.
Matos atribuye este incremento a que, coincidiendo con la recta final de año, las entidades financieras se están adaptando a las rebajas mostradas por el euríbor y tienen un mayor margen para ajustar sus ofertas hipotecarias, lo que “atraerá a más solicitantes de créditos, que ya están aumentando y que lo harán de manera más significativa a cierre de año”.
El experto argumenta que “asistiremos a una nueva lucha hipotecaria entre las entidades bancarias para captar clientes, y esta competencia impulsará un repunte de la demanda de compra y de las solicitudes de préstamos a cierre de año”. Por todo ello, prevé que la firma de hipotecas cierre 2024 por encima de las 430.000. En cuanto a las compraventas, la mayor actividad del mercado puede convertir 2024 en el segundo mejor año de la historia, por detrás de 2007, con más de 620.000 operaciones.
Este aumento de la demanda va a generar una subida de los precios que se prolongará el año que viene. A juicio de Judit Montoriol Garriga, analista de CaixaBank, “prevemos que la tendencia alcista del precio de la vivienda tendrá continuidad en 2025, con un crecimiento nominal previsto en torno al 4%, claramente por encima de la inflación”.