Varias personas resultaron heridas tras un ataque con arma blanca en la tarde del sábado en un tren de Cambridgeshire, al este de Inglaterra, lo que derivó en la detención de dos sospechosos y generó una amplia respuesta policial y de emergencia.

El incidente, calificado como un apuñalamiento múltiple, ocurrió cerca de las 19:39 horas en una formación de la London North Eastern Railway (LNER) con destino a Huntingdon, a unos 120 kilómetros de Londres.

La Policía Británica de Transporte (British Transport Police, BTP) informó a través de X que su personal, junto con agentes armados de la Policía de Cambridgeshire (Cambridgeshire Constabulary), acudió de inmediato tras recibir reportes de varios apuñalamientos en el interior del tren.

Los arrestos se efectuaron cuando el tren realizó una parada de emergencia en la estación de Huntingdon, donde se desplegó un importante operativo de seguridad.

Fuentes policiales, citadas por la BTP en X, señalaron que varios heridos fueron trasladados de urgencia a un hospital para recibir atención médica. No se han revelado detalles sobre la gravedad de las lesiones ni la identidad de las víctimas, y las autoridades mantienen abiertas las investigaciones para esclarecer el motivo del ataque.

El primer ministro británico, Keir Starmer, se refirió al suceso a través de la red X. “El atroz incidente en un tren cerca de Huntingdon es profundamente preocupante”, expresó.

La Policía de Cambridgeshire comunicó que, como parte del operativo, la carretera A1307 que conecta con el centro de la ciudad quedó cerrada para facilitar las actuaciones policiales y de emergencia en la zona.

Testigos relataron a la prensa local que algunos pasajeros se vieron obligados a ocultarse en los baños del tren durante el ataque, ante la presencia de un agresor armado con un “cuchillo grande”. El miedo y la confusión dominaron los momentos posteriores, hasta la llegada de los agentes policiales, quienes llevaron a cabo la detención de los sospechosos.

El incidente involucró al menos a dos agresores, según lo descrito por las autoridades y testigos de los hechos. De acuerdo con la información proporcionada por la BTP, el ataque se habría iniciado poco después de que el tren abandonara la estación de Peterborough.

La situación generó manifestaciones de solidaridad y preocupación en las redes sociales y medios locales. Alex Bulat, concejala del Partido Laborista en la zona, envió un mensaje a los vecinos a través de Facebook donde calificó el hecho como “realmente inquietante” y expresó que sus “pensamientos están con las víctimas y sus familias”. Por su parte, Chris Philip, ministro de Justicia y responsable del Home Office, manifestó su consternación ante las “escenas horribles” presenciadas en Huntingdon y pidió a la policía y el gobierno que ofrezcan actualizaciones lo antes posible sobre el caso y las personas detenidas.

La Policía Británica de Transporte solicitó a través de sus canales oficiales que cualquier persona que haya presenciado el incidente o disponga de información relevante se comunique con las autoridades para contribuir con la investigación. Se mantiene una destacada presencia policial en la estación y sus alrededores mientras avanzan las pesquisas.

El primer ministro británico Keir Starmer calificó como “profundamente preocupante” el ataque con arma blanca ocurrido en el tren cerca de Huntingdon (Leon Neal/REUTERS)

El fenómeno del crimen con arma blanca en Inglaterra y Gales ha experimentado un incremento constante desde 2011, según datos oficiales del gobierno. Aunque el Reino Unido dispone de una de las legislaciones más restrictivas en materia de armas de fuego a nivel mundial, el primer ministro Keir Starmer ha calificado la propagación del uso de cuchillos como una “crisis nacional”.

El gobierno laborista ha impulsado diversas medidas para frenar este tipo de delitos. De acuerdo con el Ministerio del Interior británico, cerca de 60.000 cuchillos han sido “incautados o entregados voluntariamente” en Inglaterra y Gales dentro de la estrategia oficial que busca reducir a la mitad los crímenes con arma blanca en la próxima década.

Transportar un cuchillo en espacios públicos puede acarrear penas de hasta cuatro años de prisión y, según fuentes gubernamentales, durante el último año las muertes por apuñalamiento descendieron en un 18 por ciento.

(Con información de AFP y AP)