Una serie de allanamientos realizados en La Plata permitió desarticular a una organización criminal de estructura familiar dedicada al robo y venta de volquetes. El grupo, conocido por los investigadores como “Los Orozco”, estaba integrado por un padre y su hijo, junto a un tercer joven que actuaba como cómplice.
De acuerdo con la investigación judicial, la organización operaba desde hacía un tiempo en distintos puntos del Conurbano bonaerense. El grupo tenía su base operativa en La Plata, pero sus maniobras se extendían a los partidos de Quilmes, Florencio Varela, Berazategui, Avellaneda y Lomas de Zamora, donde sustraían volquetes utilizando distintos vehículos.
Cada uno de los integrantes cumplía un rol asignado con precisión. El líder era J.R.O., un hombre de 53 años con extensos antecedentes penales por delitos contra la propiedad, quien —a pesar de encontrarse bajo arresto domiciliario— seguía dirigiendo las operaciones desde su vivienda.
El punto de quiebre en la causa llegó tras una serie de tareas de vigilancia e inteligencia que permitieron identificar los lugares donde se ocultaban y reacondicionaban los volquetes robados.
Con las pruebas reunidas, el juez Martín Nolfi autorizó dos allanamientos en domicilios de La Plata vinculados a la banda. Las diligencias, llevadas a cabo por personal de la fuerza con conocimiento previo del modus operandi del grupo, arrojaron resultados positivos: se incautaron tres volquetes, cuatro teléfonos celulares y un camión Mercedes Benz modelo 1112, color verde militar, señalado por los investigadores como el principal vehículo utilizado en las maniobras de sustracción.
Durante los procedimientos, fueron aprehendidos J.P.O., de 30 años, hijo del líder de la banda, y L.B.E.G., de 19. Según consta en el expediente, J.P.O. actuaba como chofer del camión secuestrado y tenía a su cargo la ejecución material de los robos. L.B.E.G., en tanto, se ocupaba de ocultar, acopiar y reacondicionar los volquetes robados, utilizando como cobertura un local comercial del rubro gomería, desde donde también gestionaba las ventas.
Una fuente del caso explicó que los elementos incautados son de “interés directo para la investigación” y que el camión Mercedes Benz era seguido de cerca por los investigadores, ya que había sido identificado en distintas maniobras delictivas.
Con respecto a J.R.O., el principal imputado, fue notificado por el mismo delito de “hurto reiterado”, aunque por el momento permanece en su domicilio bajo la medida de arresto previamente dictada en una causa distinta. Su prontuario incluye al menos ocho causas abiertas durante 2023 en el Tribunal Criminal N°5 de La Plata.
Entre los cargos que se le imputan figuran robos doble y triplemente calificados, por el uso de arma de fuego, por haber sido cometidos en poblado y en banda, y, en algunos casos, en grado de tentativa. También figura una causa por lesiones graves, además de una imputación por encubrimiento.
La fiscal Ximena Santoro ya dio intervención a las fuerzas de seguridad correspondientes para que continúen las tareas orientadas a identificar y localizar a otros posibles integrantes del circuito de reducción y comercialización de los volquetes robados. Las autoridades no descartan que existan otros puntos de acopio o distribución en localidades cercanas, incluso fuera del conurbano sur.
Por lo pronto, tanto J.P.O. como L.B.E.G. permanecen a disposición de la justicia, imputados por el delito de hurto reiterado. El material secuestrado será sometido a peritajes complementarios y se analizará la información extraída de los teléfonos incautados, en busca de nuevos vínculos o pruebas que amplíen el entramado de la organización.
La causa se investiga como “hurto reiterado”, intervienen en el expediente la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°7 de Quilmes, a cargo de la fiscal Ximena Santoro, y el Juzgado de Garantías N°2, cuyo titular es el juez Martín Nolfi.