Varios bomberos buscan a personas entre coches, a 2 de noviembre de 2024, en Alfafar, Valencia, Comunidad Valenciana (España). (Lorena Sopêna/Europa Press)

Exactamente, un mes después de la DANA que arrasó parte del área mediterránea peninsular y que se llevó más de 220 vidas, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha hecho pública una detallada cronología sobre el episodio de precipitaciones torrenciales y persistentes causadas por una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que afectó con especial magnitud a la Comunidad Valenciana. El informe resalta que la previsión y los avisos se emitieron con anticipación, pero la intensidad superó incluso las expectativas más altas.

En el informe titulado “Informe sobre el episodio meteorológico de precipitaciones torrenciales y persistentes ocasionadas por una DANA”, el organismo detalla las primeras alertas emitidas ya el domingo 20 de octubre. Aunque las predicciones apuntaban con incertidumbre hacia la formación de una DANA para los días 27 a 29, la posibilidad de precipitaciones intensas en la fachada mediterránea se señaló desde el primer momento. De esta manera, el informe desmiente, de nuevo, la versión del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, quien en varias ocasiones ha acusado a la AEMET de no proporcionar la suficiente información para alertar a la ciudadanía y así eludir responsabilidades de la catástrofe.

El lunes 21 de octubre, la AEMET actualizó las predicciones, aumentando la probabilidad de lluvias intensas en la zona este de la península. Los boletines de los días siguientes fueron perfilando con mayor precisión el desarrollo del episodio. Así, el jueves 24 ya se especificaba que el Levante y el área mediterránea serían las zonas más afectadas. Para el viernes 25, se emitió la primera nota informativa del episodio, anunciando que las lluvias más intensas ocurrirían el martes 29, aunque con aún gran incertidumbre sobre su localización exacta. “Es posible que en puntos de la vertiente mediterránea se den chubascos y tormentas fuertes, o muy fuertes, y localmente persistentes”, escribieron.

Récord del siglo

El lunes 28, la AEMET renovó el aviso especial, destacando que el día 29 se esperaba la mayor intensidad de las lluvias en el Estrecho, Andalucía Oriental, Murcia, Castilla-La Mancha y, sobre todo, en la Comunidad Valenciana. En este último territorio, el pronóstico apuntaba a que la lluvia podría superar los 150 l/m2 en un período de 12 a 24 horas.

El martes 29, día en que se alcanzaron los máximos de acumulación de precipitaciones, la AEMET emitió un aviso especial por la alta probabilidad de que se superaran los 150-180 l/m2 en algunas zonas de la Comunidad Valenciana y Murcia. De hecho, según el informe, la precipitación acumulada más alta se registró en la provincia de Valencia, con entre 200 y 300 l/m2 en varias localidades. En el municipio de Turís, en el interior norte de la provincia, se alcanzaron más de 700 l/m2.

El día 29, la AEMET emitió sucesivas actualizaciones de los avisos para la Comunidad Valenciana, comenzando por un aviso de nivel rojo a las 09:41, ante la previsión de acumulados de entre 90 y 180 l/m2 en las próximas horas. A medida que avanzaba el día, los niveles de alerta se elevaron por la magnitud de las precipitaciones. En el litoral sur de Valencia, a las 07:36, se emitió un aviso de nivel rojo por acumulados de 90 l/m2 en una hora, que se extendió hasta las 12:00 horas. Posteriormente, los avisos se redujeron a naranja, pero la intensidad de las lluvias no aminoró.

A lo largo de la jornada, se continuaron actualizando los avisos, con incrementos en los valores acumulados. La última actualización del día se produjo a las 19:47, cuando se prolongaron los avisos de nivel rojo hasta las 22:00 horas, con acumulados de hasta 200 l/m2 en 12 horas.

Sobre el contexto climático, la organización sí apunta que “es la mayor riada provocada por una DANA en el siglo XXI en nuestro país, comparable con otras históricas sucedidas en la Comunitat Valenciana durante las décadas de los años 50 y 80 del siglo pasado”, dicen sobre la riada del Turia, en 1957, y la pantanada de Tous, a comienzos de 1980.